No es normal (o no me lo parece)

La verdad es que hoy me he levantado con el MODE IRONIC ON y cuando ojeo y hojeo (de ojos y de hojas) el periódico no puedo evitar la típica sonrisa a medio camino entre el humor, la mala hostia y la vergüenza ajena con varias noticias. Os cuento.

La primera es cojonuda y algo he comentado en mi facebook. Los Duques de Palma gastaron 7.888 euros en la contratación de un  mimo en una fiesta privada. 7.888 euros que cargaron a la empresa esa, de la que SAR la Infanta no sabe no contesta, para que les devolvieran el 16% de IVA y a la que también cargaron el montante de la fiesta, unos 81.000 euros. El mimo no ha dicho ni mú y, como también comento en el caralibro, a nosotros el Grupo Vocento no nos permite decir ni esta boca es mía impidiendo los comentarios de los usuarios. Viva la libertad de expresión y, como penoso ejemplo de la misma, a tomar por el culo el cuarto poder corrompido que sufrimos en este reino bananero. (Ojala llegásemos a ser república bananera pero ni eso).

La segunda tiene temática diferente. Las escuchas de los americanos a los líderes políticos europeos. ¡Coño! ¡QUE SON ESPIAS! Profesionales que cobran por espiar, que es su trabajo. Un poco chapuza eso sí, como Mortadelo y Filemón, porque les han pillado. Y aquí pedimos que el jefe de nuestros espías vaya al Congreso a explicar si ellos espían o no. En menudo compromiso le han metido. Si el jefe del CNI, Centro Nacional de Inteligencia (artificial se podría añadir), llega el Congreso y dice que los nuestros espían se monta una polvareda del carajo y si dice lo contrario… ¿para que coño es el CNI? “Vamos, p´habenos matao”

Sigo repasando la portada (por Internet desde luego, para leer esto es incluso saludable no pagar ni un céntimo) y mis ojos se abren de golpe: “Performance en una galería” en el antetítulo, “LO ULTIMO EN ARTE: UN JOVEN GAY PERDERA SU VIRGINIDAD DELANTE DE 100 PERSONAS” en el título. Aunque sigo en estado de sock, mi cerebro comienza poco a poco a recuperar cierta actividad y me salen varias dudas. ¿Va a dar o a tomar? ¿Con luz o sin luz? ¿Lo sabe la Conferencia Episcopal? ¿Se servirá un cóctel en dicha performance? ¿Cómo se va a comprobar que es virgen ya que pudiera incurrir en publicidad engañosa? ¿Se necesita invitación para la asistencia a dicho evento? ¿Será retransmitido por el SALVAME de Jorge Javier?... Vamos, un claro ejemplo de estupidez humana. Para mayor desprecio de la inteligencia humana los asistentes al “acto” podrán expresar sus opiniones que, teniendo en cuenta el coeficiente intelectual de los mismos, pueden ser parecidas a estas: “Me ha encantado como incidía el haz luminoso sobre la raja del culo, que con las embestidas desarrollaba un precioso arcoíris”, “Sin duda, una obra maravillosa de temática japonesa (porque le han puesto el culo como la bandera de Japón)” o “Una gran representación de la dualidad espacio-tiempo con ondulaciones electromagnéticas que hemos percibido, siendo envueltos en una atmósfera de relax espiritual”. En fin, para que más. (Espacio patrocinado por “VASELINA FERNANDO, APRIETA QUE YA VA ENTRANDO”)

Para terminar este sinsentido, la morenita Rihanna reformará su casa porque quiere tener una habitación para practicar sexo al estilo del tocapelotas ese de Grey (Jesús, daño que están haciendo los dichosos libros que son malos no, lo siguiente). A los pocos minutos de publicar la “noticia” ya se habían recibido cerca de 7 millones de comentarios de generosas personas que ofrecen su habitación a la citada señorita, entre los cuales no esta el mío, debo aclarar, ya que me puede costar un disgusto con mi señora. Al final, y después de valorar sesudamente las opciones, creo que la mejor es que vaya con el del arte (o con él de helarte) de la noticia anterior y que les den a los dos a la vez. ¡VIVA EL ARTE Y LOS ARTISTAS!

Semana Delibes

Por esas raras casualidades de la vida, como puede ser la insistencia de mi señora en hacer una limpieza en el trastero, vuelven a caer en tus manos objetos que pertenecen a otros momentos de tu vida. Sabías que estaban por algún sitio pero que la falta de tiempo u otros nuevos los condenaron al olvido.

Pues eso, que me pongo manos a la obra a hacer una limpieza del trastero y al abrir una caja que llevaba por lo menos ocho años “perdida” allí, descubro que esta llena de libros. Claro, como la curiosidad mató al gato, comienzo a echar un vistazo; la mayor parte de ellos son ediciones de bolsillo de autores que ni me acuerdo haber leído, y sobre los que no escribiría una reseña ni en sueños, y algún otro pertenece a mi época, ¡mira que ha llovido!, de estudiante. Pero entre los unos y los otros aparecen en mis manos dos ejemplares en edición de bolsillo, baratas y de tapa blandita, de dos obras de Miguel Delibes: EL CAMINO y LOS SANTOS INOCENTES. Coño esto pinta bien, así que doy semana libre a mi dispositivo electrónico de lectura, a mi e-book dicho de forma más moderna, y vuelvo a sentir el tacto del papel.

De Delibes siempre me ha maravillado su forma de describir a los personajes, es más, creo que es la característica principal de su obra, radiografía a sus personajes. Las descripciones de los parajes donde ambienta el relato, las situaciones, las emociones que sienten, los nombres, e incluso los motes tienen como finalidad principal que el personaje sea nuestro, que nos pertenezca. Aún así también se intuyen en su obra otras características como cierta crítica social o a ciertas costumbres, la confrontación ambiente rural ciudad, la muerte o el amor.   

Así que esta semana he vuelto a disfrutar con EL CAMINO (1950) como disfruté hace muchos años. Yo creo que fue el primer libro que leí, seguro que obligado, y siempre he guardado un recuerdo especial. He vuelto a sentir la tristeza de El Mochuelo la noche anterior a su partida para iniciar el Bachillerato, he aprendido que las perdices hacen “Prrr” y no “Brrr’ con El Tiñoso, y me he reído un montón con Roque El Moñigo, la Josefa, las Guindillas, las Leporidas, Don Moisés “El Peon” (ya sabeís, camina de frente y come de lado), la Uca-Uca, Quino “el manco”, la Mica, Don José, que era un gran santo, y el resto de personajes con los que nos obsequia. ¿Este libro no es obligado en la ESO? (ASI NOS LUCE EL PELO)

El segundo libro es LOS SANTOS INOCENTES (1981). Como he visto varias veces la película, acabé poniendo las caras de Alfredo Landa, Paco Rabal y Juan Diego a Paco El Bajo, a Azarías y al “peazo de cabrón” del Señorito Iván. No es un gran problema porque los actores lo bordaron y Delibes no entra en detalle en las características físicas de sus personajes mas de lo necesario para resaltar otras cualidades que no se ven con los ojos. Por ello, te va metiendo en cada personaje, en su cabeza, te hace participe de sus miserables vidas, de sus penurias o de su inocencia: sonríes corriendo al cárabo y sientes la ternura de Azarías con la "milana bonita" y con la niña-chica, te creces con Paco El Bajo cuando ancha los agujeros nasales y sientes, sumiso y resignado, el desprecio con el que te obsequian los de la clase "pudiente". Lo sientes como si fueses tu mismo y, por ese mismo motivo, algo te va comiendo por dentro, te va quemando, indignando y llega el colofón, el final, ahí si que se disfruta. ¡Que bien se queda uno!

Bueno, ya veis que ha sido una semana provechosa: dos preciosos libros de Delibes y el trastero limpio.